El Gobierno de Donald Trump comunicó este lunes que realizará un pago parcial del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) utilizando los fondos de contingencia disponibles, mientras continúan las negociaciones sobre cómo cubrir el déficit generado por el cierre parcial del Gobierno. La decisión busca aliviar temporalmente la situación de millones de familias que dependen de estas ayudas para comprar alimentos.
Según la Administración, los 4,650 millones de dólares disponibles en el fondo de contingencia alcanzarán para cubrir aproximadamente la mitad de las asignaciones previstas para noviembre. Sin embargo, no se ha precisado aún la cantidad exacta que recibirán los beneficiarios ni cuándo se reflejará en las tarjetas electrónicas que utilizan para realizar sus compras.
El proceso de recarga puede tardar hasta dos semanas en algunos estados debido a la coordinación entre agencias federales, estatales y proveedores.
El subsecretario adjunto del Departamento de Agricultura Patrick Penn, explicó que no se recurrirá a otros fondos federales, como los destinados al Programa de Nutrición Infantil de la Sección 32, ya que esto pondría en riesgo la continuidad de otros programas esenciales de alimentación para niños durante todo el año fiscal.
“Transferir dinero de esos fondos para cubrir un mes de SNAP generaría un vacío sin precedentes y podría afectar directamente a los millones de niños que dependen de comidas escolares”, indicó Penn.
El impacto del retraso en los pagos ya se ha dejado sentir en distintas partes del país. En Texas y California, varios estadios se transformaron temporalmente en centros de distribución de alimentos, donde las familias acudieron en busca de cajas de productos básicos, carne congelada y otros elementos esenciales para el hogar.
Líderes estatales de 25 estados habían presentado demandas para obligar al USDA a garantizar los pagos completos durante el cierre, pero la Administración respondió que solo se podrá garantizar un pago parcial.
El juez federal de distrito John McConnell había dado instrucciones claras para que se realizara un pago completo o, al menos, uno parcial antes de este lunes. La Casa Blanca y la Oficina de Gestión y Presupuesto han sido las encargadas de coordinar los esfuerzos, mientras la secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, reconoció que los fondos de contingencia no alcanzarán para cubrir la totalidad de las prestaciones de noviembre.
Con más de 40 millones de estadounidenses beneficiándose del SNAP, la situación ha generado preocupación por el acceso a alimentos de familias de bajos ingresos, especialmente en un momento del año en el que los costos de alimentación suelen incrementarse.
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