El gobernador de Florida, Ron DeSantis, declaró el jueves un estado de emergencia ante una perturbación tropical que podría impactar gran parte del estado este fin de semana.

La onda tropical, ahora identificada como Invest 97-L, está trayendo lluvias y tormentas eléctricas desorganizadas a La Española, Puerto Rico y las Islas Vírgenes, según la orden del gobernador. Tiene un 70% de probabilidad de desarrollarse en una depresión tropical o tormenta en los próximos siete días, con el potencial de traer lluvias intensas e inundaciones subsiguientes a Florida.

Estas condiciones de tormenta "podrían dañar la capacidad operativa de infraestructuras críticas, incluyendo autopistas y carreteras principales, puentes, aeropuertos, escuelas, hospitales, redes eléctricas y otras infraestructuras esenciales," señala el memo de DeSantis.

Emitir un estado de emergencia permite al estado ejecutar su plan de gestión de emergencias y llevar a cabo cualquier operación logística, de rescate o evacuación necesaria. Los condados de Florida bajo el estado de emergencia incluyen Alachua, Baker, Bay, Bradford, Calhoun, Charlotte, Citrus, Clay, Collier, Columbia, Dixie, Duval, Escambia, Flagler, Franklin, Gadsden, Gilchrist, Gulf, Hamilton, Hernando, Hillsborough, Holmes, Jackson, Jefferson, Lafayette, Lake, Lee, Leon, Levy, Liberty, Madison, Manatee, Marion, Monroe, Nassau, Okaloosa, Orange, Osceola, Pasco, Pinellas, Polk, Putnam, Santa Rosa, Sarasota, Seminole, St. Johns, Sumter, Suwannee, Taylor, Union, Volusia, Wakulla, Walton y Washington.

Esta declaración subraya la importancia de estar preparados y atentos a las actualizaciones meteorológicas para garantizar la seguridad de todos los residentes de Florida.

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