En La Habana, petrolero ruso 'Jasper'
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 26 de diciembre de 2025
Un barco petrolero arribó en las últimas horas a la Base de Tanqueros del Puerto de La Habana, según reportes recibidos por la redacción de La Tijera News, en un hecho que vuelve a generar cuestionamientos sobre el discurso oficial del Gobierno cubano en torno a la crisis energética que atraviesa el país.
El ingreso de la embarcación se produjo pese al despliegue naval que mantiene el Gobierno de los Estados Unidos en el Caribe, lo que, de acuerdo con la información disponible, evidencia que el régimen cubano continúa recibiendo suministros de combustible. Este arribo contrasta con las explicaciones ofrecidas de manera reiterada por las autoridades, que atribuyen los apagones prolongados y la inestabilidad del sistema eléctrico nacional exclusivamente al embargo estadounidense y a la supuesta imposibilidad de acceder a hidrocarburos.
En los últimos meses, la población cubana ha enfrentado cortes eléctricos diarios que en algunas provincias superan las 10 y hasta 15 horas continuas sin servicio. Esta situación afecta de manera directa la vida cotidiana, la conservación de alimentos, el funcionamiento de hospitales, escuelas y centros productivos, así como el transporte público y los servicios básicos. Sin embargo, el arribo frecuente de buques petroleros al país plantea interrogantes sobre la gestión, distribución y destino final del combustible que entra a la isla.

Especialistas y ciudadanos han señalado en reiteradas ocasiones que el problema energético en Cuba no se limita únicamente al acceso al crudo, sino también a la falta de transparencia, a la obsolescencia de las termoeléctricas y a una administración ineficiente de los recursos. La llegada de este petrolero refuerza la percepción de una contradicción entre el discurso oficial y los hechos visibles, especialmente para una población que vive sumida en la incertidumbre y el desgaste diario.
Mientras el Gobierno insiste en responsabilizar a factores externos por la crisis, el pueblo continúa enfrentando una realidad marcada por la oscuridad, la escasez y el deterioro de la calidad de vida. Para muchos cubanos, cada nuevo arribo de combustible sin una mejora perceptible en el servicio eléctrico profundiza la desconfianza y alimenta el malestar social.
El hecho de que estas operaciones se mantengan activas, incluso en un contexto geopolítico complejo, refuerza las críticas de quienes consideran que la narrativa oficial no refleja completamente la situación real del país. La falta de información pública detallada sobre la cantidad de combustible recibido, su distribución y su impacto concreto en la generación eléctrica sigue siendo uno de los principales reclamos ciudadanos.
El arribo del buque petrolero al Puerto de La Habana vuelve así a colocar en el centro del debate la gestión energética del país y la necesidad de mayor claridad por parte de las autoridades, en un momento en que la población exige respuestas concretas y soluciones reales a una crisis que se prolonga sin un horizonte claro.