Convocatoria al 9no Congreso del PCC: Más ideología, menos soluciones para una Cuba en crisis
Redacción de CubitaNOW ~ sábado 5 de julio de 2025

El Partido Comunista de Cuba (PCC) ha anunciado la convocatoria oficial a su 9no Congreso, previsto para celebrarse del 16 al 19 de abril de 2026, en un momento en que la isla atraviesa una de las peores crisis económicas y sociales de su historia reciente. Sin embargo, lejos de proponer un cambio real o una revisión crítica del rumbo seguido durante décadas, la cúpula gobernante insiste en repetir el mismo discurso ideológico que ha condenado a generaciones enteras a la pobreza, el aislamiento y la desesperanza.
El anuncio se presenta como un "homenaje" al centenario del nacimiento de Fidel Castro y apela a la resistencia frente a lo que llaman “una agresiva política estadounidense y un mundo amenazado por el fascismo”. Pero esta retórica desgastada solo sirve para maquillar la incapacidad del régimen de ofrecer soluciones tangibles a los problemas que ellos mismos han generado: inflación descontrolada, colapso energético, escasez crónica de alimentos y medicinas, deterioro del sistema de transporte y un éxodo masivo que evidencia el profundo desencanto del pueblo cubano.
En lugar de reconocer los fracasos estructurales del modelo socialista impuesto desde 1959, el documento de convocatoria insiste en los mismos "objetivos" que han sido repetidos en congresos anteriores: fortalecimiento de la empresa estatal, recuperación de la economía nacional, impulso a la inversión extranjera y perfeccionamiento de la democracia socialista. Todos conceptos que, en la práctica, han demostrado ser vacíos, inoperantes o directamente ineficaces bajo las reglas del sistema cubano.
La doctrina marxista-leninista sigue siendo el faro del Partido, aunque resulte cada vez más evidente que dicho modelo ha colapsado económica, moral y políticamente. Los cubanos ya no creen en las promesas de un futuro mejor que nunca llega. Las constantes apelaciones a la "unidad", a la "resistencia" y al "enemigo externo" no pueden ocultar la falta de resultados concretos ni el creciente deterioro de las condiciones de vida en la isla.
La convocatoria menciona el combate a la corrupción, la ilegalidad y la indisciplina social, pero no reconoce que estos fenómenos son, en buena medida, consecuencia directa de un sistema que ha desmotivado el trabajo honesto, ha criminalizado la iniciativa privada durante décadas y ha fomentado una doble moral socialmente aceptada para sobrevivir en medio de la escasez.
Se habla también de la necesidad de reforzar la ideología y el control político a través de la educación, la cultura y los medios, dejando claro que uno de los principales intereses del régimen no es el bienestar del pueblo, sino la preservación de su poder absoluto. El PCC se autoproclama como “fuerza rectora de la sociedad”, sin admitir su responsabilidad directa en la bancarrota nacional.
Este congreso podría ser una oportunidad histórica para revisar de manera crítica las políticas fallidas del pasado, abrir el camino a nuevas ideas, permitir mayor participación ciudadana y reconocer el papel clave de un sector privado independiente en la recuperación del país. Pero nada de eso está en la agenda del régimen.
Mientras la élite gobernante se aferra a un modelo obsoleto, el pueblo cubano sigue hundido en la miseria, con apagones diarios, salarios simbólicos, colas interminables y un horizonte cada vez más sombrío. El 9no Congreso, si se mantiene dentro de los mismos esquemas, no será más que otro espectáculo ideológico sin impacto real sobre la vida de los ciudadanos.