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Séptimo ataque a la Ermita del Potosí en Guanabacoa indigna a la comunidad

Redacción de CubitaNOW ~ jueves 2 de octubre de 2025

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La Ermita del Potosí, en Guanabacoa, volvió a ser blanco de un ataque vandálico, el séptimo registrado en los últimos tiempos, según denunció el párroco de La Milagrosa el pasado 21 de septiembre. El sacerdote expresó su pesar y frustración ante la destrucción y saqueo de este templo, considerado el edificio católico más antiguo de la villa.

Los daños incluyen la rotura de una ventana ya deteriorada por falta de mantenimiento, basura y restos de animales muertos arrojados en el interior —entre ellos gallinas y una tortuga—, además de la profanación de tumbas y la ultrajación de una tarja conmemorativa contra la esclavitud colocada en el lugar hace más de tres siglos. Los atacantes también defecaron dentro del recinto, lo que incrementó la indignación de la feligresía.

El robo alcanzó objetos religiosos de uso esencial, como los candelabros del altar y el motor del sistema de bombeo de agua. Para la comunidad, la falta de custodia y la indiferencia de las autoridades han dejado expuesto este Monumento Nacional.

El párroco recordó que, una semana antes, la policía había desestimado una denuncia similar presentada por el diácono Fermín y otro representante de la parroquia, en medio de una ola de robos y profanaciones en templos e inmuebles patrimoniales de Guanabacoa. “La policía nos remitió: ‘se quitó el muerto’”, lamentó. Ante la nueva agresión, los fieles acudieron a oficinas de Patrimonio y Asuntos Religiosos, sin obtener más que una promesa de investigación.

La Ermita de la Inmaculada Concepción y del Santo Cristo del Potosí —erigida en 1644 y declarada Monumento Nacional en 1997— constituye un hito arquitectónico y espiritual para la localidad. A lo largo de su historia ha sido escenario de episodios relevantes, como el pronunciamiento antiesclavista de los sacerdotes capuchinos Francisco José de Jaca y Epifanio Morains en 1681, hecho recordado por la tarja profanada en este último ataque.

Aunque en 2004 fue restaurada gracias a fondos de la Iglesia Católica y una organización alemana, el templo enfrenta nuevamente un estado alarmante de deterioro y desprotección. Vecinos y especialistas alertan que la inseguridad, el vandalismo y la desidia institucional amenazan con borrar siglos de memoria religiosa y cultural.

“Es muy triste lo que está sucediendo con la Ermita; está nuevamente en riesgo de caer en el olvido ante el abandono y la indiferencia de las autoridades que deben velar por esto”, denunció Gloria, feligresa de la comunidad. La archivista local A. Menéndez agregó que la crisis de valores y la falta de compromiso oficial agravan la situación: “La gente está concentrada en sobrevivir… y ver que las instituciones se lavan las manos cuando suceden actos como estos es bastante desalentador”.


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