La ya baja capacidad de generación eléctrica en Cuba se redujo aún más al inicio de diciembre tras una nueva avería en la termoeléctrica de Renté, en Santiago de Cuba.

La rotura ocurrió este domingo en la tarde en la unidad 3 de la planta, debido a un “salidero en la estación de alimentar de la caldera”, según informó la Unión Eléctrica (UNE). Con ello, la disponibilidad disminuyó todavía más, mientras la afectación máxima en el horario nocturno ascendió hasta 1849 MW.

Sin embargo, las previsiones oficiales indican que esa cifra será superada hoy. A las 6:00 AM apenas se generaban 1300 MW, una cantidad ya cercana al déficit existente a esa hora. Al mediodía, aun con el aporte de los parques solares, la afectación prevista era de 1200 MW.

Tras la salida de Renté 3, son seis las unidades térmicas desconectadas por averías o mantenimientos, a las que se suma la planta de tratamiento de gas de Energás Puerto Escondido. Además, las limitaciones en los bloques en funcionamiento ascendían a 547 MW, mientras otros casi 1000 MW no se producirán este lunes por falta de lubricantes y combustible, lo que mantiene 96 centrales paradas.

Ninguno de esos motores se recuperará durante el día, lo que mantendrá en números rojos la generación en el pico nocturno. Solo se prevé la recuperación de 25 MW con el completamiento de Felton 1, que ha estado trabajando con limitaciones.

De esta forma, la disponibilidad en esa franja horaria será de apenas 1325 MW, mientras que la afectación se acercará a los 2000 MW (1995 MW). Y pudiera ser incluso mayor si ocurre alguna nueva rotura o si la demanda sobrepasa las previsiones oficiales, estimadas en 3250 MW.

La crisis energética se profundiza así en Cuba, con un panorama de apagones masivos que golpean la vida cotidiana y reflejan el deterioro estructural del sistema eléctrico nacional.

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