El Ministerio del Interior (MININT) en Guantánamo emitió una nota oficial para aclarar los hechos ocurridos en la madrugada del domingo 23 de noviembre, cuando una riña iniciada en el Bar Estocolmo terminó con varios lesionados y daños materiales en el hospital provincial.

Según la información divulgada, el incidente comenzó dentro del bar, ubicado en pleno centro de Guantánamo, cuando varios ciudadanos —algunos procedentes de Santiago de Cuba y bajo los efectos del alcohol— protagonizaron una disputa motivada por conflictos de carácter pasional. La confrontación escaló rápidamente, obligando a la seguridad de la instalación a intervenir para expulsar a los involucrados.

Sin embargo, la riña no terminó allí. Ya en la vía pública, los implicados continuaron agrediéndose, lo que dejó un número no especificado de lesionados. Estas personas fueron trasladadas en un vehículo particular hacia el hospital provincial para recibir atención médica.

Mientras los heridos eran atendidos, cuatro ciudadanos llegaron al centro asistencial a bordo de dos motocicletas, aparentemente con la intención de reanudar el altercado. En ese momento, lanzaron piedras contra el automóvil que había transportado a los lesionados y que se encontraba estacionado frente al Cuerpo de Guardia. El ataque provocó daños en el parabrisas trasero del vehículo y en dos cristales de la puerta de acceso al hospital, afectando la infraestructura del servicio de urgencias.

El MININT informó que, tras iniciarse el correspondiente proceso investigativo, todas las personas involucradas fueron identificadas. Actualmente están siendo procesadas conforme a la gravedad de sus acciones, las circunstancias en que ocurrieron los hechos y lo estipulado por la legislación vigente.

Las autoridades recalcaron su rechazo a este tipo de comportamientos, que calificaron como actos que alteran la tranquilidad ciudadana y ponen en riesgo la seguridad de las personas, además de provocar daños a bienes colectivos. La institución insistió en la necesidad de mantener el orden público y el respeto mutuo, especialmente en espacios recreativos donde el consumo de alcohol suele incrementar los riesgos de violencia.

El suceso añade un nuevo capítulo a la creciente preocupación por los episodios de violencia asociados a riñas en centros nocturnos y áreas públicas, un fenómeno que ha sido señalado repetidamente por ciudadanos en redes sociales y que mantiene en alerta a las autoridades locales.

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