El camino de Lina Luaces para representar a Cuba en el Miss Universo 2025, que se celebrará en Tailandia, no ha estado libre de polémicas. Como suele ocurrir en los certámenes de belleza, las críticas no tardaron en llegar, tanto desde las redes sociales como desde la prensa oficialista cubana.
En una columna publicada en Cubadebate, la autora cuestionó si Luaces, pese a no poner en duda la “cubanidad” de los residentes en el exterior, era realmente apta para representar a la nación en un evento internacional.
Frente a estas críticas, su madre, la reconocida presentadora cubanoestadounidense Lili Estefan, defendió la legitimidad de la candidatura de su hija y del certamen. Recordó que en Cuba los concursos de belleza han estado prohibidos por más de cinco décadas, razón por la cual la organización decidió realizar la selección en Miami. “Cuba se pasa 52 años sin permitir a una cubana que vaya al Miss Universo y cuando el Miss Universo como organización decide crear un Miss Universo Cuba en el exilio para que estas niñas que nunca han tenido la oportunidad de representar a su país, ya sea de sus padres, porque al final Lina está representando el país de sus padres, que así son los requisitos del Miss Universo, también la critican, pero fuerte”, expresó Estefan.
La presentadora subrayó además que la participación de su hija representa a la mujer cubana moderna. “Yo creo que lo principal es que la mujer ha encontrado algo donde puede representar, no solamente la belleza, pero lo que es la mujer de hoy, la mujer trabajadora, la mujer empoderada, la mujer que sueña, la mujer que quiere ser parte de esta gran organización”, agregó.
El tema ha generado un intenso debate dentro y fuera de la Isla, profundizando la brecha entre el oficialismo y el exilio. El surgimiento de concursos como Miss Universo Cuba también ha amplificado voces críticas, como la de Mía Donadio, quien pese a no haber nacido en Cuba, ha cuestionado abiertamente al régimen.
Por su parte, Lina Luaces ha preferido no quedar al margen de la discusión. Además de pertenecer a una de las familias más reconocidas del exilio cubano, la joven ha expresado en varias ocasiones sus opiniones sobre la realidad de la Isla. El pasado 11 de julio, por ejemplo, recordó públicamente las protestas masivas de 2021 en Cuba.
Así, a pocos meses de Miss Universo 2025, la participación de Luaces no solo despierta entusiasmo por su proyección internacional, sino también encarna una disputa simbólica sobre quién puede —y debe— representar a Cuba en el escenario global.
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