La música electrónica cubana celebró un nuevo hito con la participación de Pauza en el Danzû FSTVL, celebrado el pasado 15 de agosto en Mallorca. El dúo, integrado por las djs y productoras Paula Fernández y Zahira Sánchez, fue el encargado de abrir el espectáculo de Carl Cox, una de las figuras más influyentes de la escena electrónica mundial.
Radicadas en Madrid, Fernández y Sánchez se han consolidado como una de las propuestas más sólidas de la electrónica cubana contemporánea. Su sello distintivo es la fusión de ritmos cubanos con variantes del house, una mezcla que les ha abierto espacio en festivales internacionales tanto en España como en América Latina.
Antes de establecerse en Europa, Pauza ya era un nombre de peso dentro de la música alternativa en Cuba. Allí formaron parte del colectivo femenino GBass Beat, junto a otras djs y productoras como Bjoyce, quien posteriormente alcanzó reconocimiento en la escena estadounidense.
El cartel que las unió a Carl Cox es, sin dudas, un espaldarazo simbólico para su carrera. Con más de tres décadas de trayectoria, Cox es considerado un pionero del techno y la fusión electrónica. Fundador de su propio sello discográfico en 1998, dejó huella con su histórica residencia de 15 años en Space Ibiza, uno de los templos de la música electrónica a nivel internacional.
No es la primera vez que artistas cubanos del género comparten escenario con referentes mundiales. En 2016, Djoy de Cuba participó en el festival Name, en Francia, junto al prestigioso dj francés Laurent Garnier, marcando otro momento memorable para la representación cubana en grandes festivales.
La participación de Pauza en el Danzû FSTVL confirma la proyección internacional del dúo y la capacidad de la electrónica cubana para insertarse en escenarios de alto calibre, sumando presencia y reconocimiento en la escena global.
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