Cinco boxeadoras francesas han sido excluidas del Campeonato Mundial de Boxeo que se efectúa en Inglaterra, al no cumplir con el nuevo requisito de verificación de sexo impuesto por World Boxing.
La decisión ha provocado una fuerte reacción por parte de la federación francesa, que expresó su “asombro e indignación” ante lo que consideran una medida discriminatoria y contraria a la legislación nacional.
Las deportistas afectadas son Romane Moulai, Wassila Lkhadiri, Melissa Bounoua, Sthélyne Grosy y Maëlys Richol. Todas quedaron fuera del torneo por no haber presentado los resultados de las pruebas dentro del plazo establecido.
Según el comunicado emitido por la delegación gala, estas pruebas están prohibidas en Francia, ya que vulneran la privacidad de las mujeres en el deporte, por lo que realizar el proceso en otro país resultó inaceptable para las atletas.
La normativa fue introducida por World Boxing el 30 de mayo de este año, como respuesta a la polémica surgida en los Juegos Olímpicos de París 2024. En aquel evento, las medallas de oro obtenidas por la argelina Imane Khelif y la taiwanesa Lin Yu-ting generaron dudas sobre los criterios de elegibilidad en la categoría femenina, provocando un intenso debate público y mediático.
World Boxing defiende la implementación de estas pruebas, argumentando que son necesarias para “preservar la equidad competitiva y la integridad del deporte”. Sin embargo, la organización aún no ha respondido directamente a las críticas planteadas por la federación francesa, ni ha abordado las posibles implicaciones legales de su decisión.
Mientras tanto, diversas organizaciones feministas y colectivos deportivos han mostrado su apoyo a las boxeadoras francesas, calificando la medida de World Boxing como “invasiva” y “estigmatizante”.
El caso ha vuelto a poner sobre la mesa la discusión sobre la verificación de sexo en el deporte, especialmente en disciplinas con categorías separadas por género, donde confluyen factores biológicos, legales y éticos.
Por ahora, las cinco atletas se quedan fuera del Mundial, y la polémica promete continuar. Las consecuencias de esta decisión podrían repercutir más allá del boxeo, afectando la normativa en otros deportes a nivel internacional.
Fuente: El Periódico de Aragón