La temporada 2025 de las Grandes Ligas dejó un nuevo hito de poder en el montículo. Desde que en 2008 comenzó la era Statcast, nunca se había registrado tanta velocidad acumulada: 82 lanzadores distintos alcanzaron al menos una vez las 100.0 millas por hora, un número sin precedentes en la historia moderna del béisbol.
El dominio de la fuerza bruta se refleja también en otro récord: 12 serpentineros lograron más de 100 lanzamientos por encima del triple dígito, encabezados por Mason Miller (422), Hunter Greene (296) y Jhoan Duran (271). Les siguieron Daniel Palencia (246), el novato Jacob Misiorowski (213), Seth Halvorsen (194) y el incombustible cubano Aroldis Chapman, quien sumó 180 disparos sobre las 100 mph a sus 37 años.
Completan la lista de los más veloces Ryan Helsley (158), Edgardo Henríquez (135), Trevor Megill (123), Joel Peguero (105) y Robert Suárez (100).
De los 82 lanzadores que alcanzaron las tres cifras, 72 son derechos y apenas 10 zurdos, confirmando la superioridad de los brazos diestros en términos de potencia pura. Sin embargo, la velocidad no siempre garantiza éxito: ante rectas de más de 100 mph, los bateadores de MLB apenas promediaron .193 (176 hits en 912 turnos), con 15 cuadrangulares conectados en toda la campaña.
Por Cuba, dos serpentineros dejaron su marca en el club del fuego: Chapman, aún referente de la velocidad extrema, y Adrián Morejón, quien registró cuatro envíos por encima del centenar.
La temporada 2025 quedará así marcada por la era de los lanzadores de alta octanaje, donde el radar se convirtió en protagonista y la búsqueda de las 100 mph parece ya una exigencia más que una excepción.